- Logro inédito a nivel nacional que incide positivamente en el bienestar de los vallartenses y en la oferta turística del destino
Por trigésima segunda ocasión consecutiva, SEAPAL Vallarta logró el Certificado a la Condición Sanitaria del Sistema de Abastecimiento y Calidad del Agua para uso Humano en Puerto Vallarta, el cual emite la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Jalisco (COPRISJAL).
Durante el Gobierno del Profesor Luis Alberto Michel Rodríguez se ha priorizado el trabajo operativo para mantener los más altos estándares de calidad en los servicios que otorga el organismo que encabeza Jorge Castillo Núñez, con el objetivo de mejorar la calidad de vida y bienestar de las familias vallartenses, además de ser un factor fundamental para elevar la oferta turística del destino.
Esta distinción es testimonio del compromiso constante del organismo operador con la innovación y la mejora continua en sus operaciones, lo que contribuye a cumplir a cabalidad de las normas oficiales mexicanas y sus modificaciones NOM-179-SSA1-2020, NOM-230-SSA1-2002 y NOM-127-SSA1-1994-MOD 2000, para que el Agua que se distribuye a la población y franja turística, cuente con las características fisicoquímicas y bacteriológicas para considerarse apta para consumo humano.
Esto además refleja el esfuerzo, talento y dedicación de ingenieros, personal técnico, administrativo y de campo, especialmente de los departamentos involucrados de manera permanente en estas tareas, tal es el caso de Producción de Agua Potable, Distribución de Agua Potable, Calidad del Agua, Atención a Usuarios y Laboratorio, quienes son coordinados por la QFB Soraya Topete Camacho.
El proceso de verificación para la obtención del certificado se realiza previamente en instalaciones de producción, potabilización, distribución, regulación y almacenamiento de agua potable del sistema operador vallartense.
Este proceso es fortalecido con la intervención de un laboratorio externo acreditado ante la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA), que analiza aspectos organolépticos, físicos, químicos, bacteriológicos y radiactivos, así como monitoreos internos de cloro residual en puntos iniciales, intermedios y finales de la red de distribución.